sábado, 25 de octubre de 2008

Hoy no es un buen día.

No, hoy no es un buen día.
Son demasiadas las cosas que rondan por mi cabeza, demasiadas las preocupaciones que no me dejan dormir y que hago? Me callo... Y claro, acabo por explotar. Estoy cansada de llorar tirada en la cama, de sentir el frío, de no poder gritarle al mundo.
Estoy cansada de no ser la de antes, de haber cambiado tanto que incluso a mi me cueste reconocerme. Todos dirán que sigo siendo la misma de siempre, con mis tonterías, siempre (o casi) con una sonrisa en la boca, pero muy pocos (si es que lo hace alguien) se darán cuenta de que en realidad es una mascara, que aunque esté riendo necesito llorar, que hace tiempo que me callo, que no encuentro la salida.
A medida que pasa el tiempo todo se hace más cuesta arriba; ya no sé que hacer, que decir, como actuar... pero, que hacer?
Da igual. A quién le importa?. Hasta a mi ha dejado de hacerlo...









P.D.: Siento ser tan pesimista, pero hay días demasiado negros.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Yo si que me di cuenta de que cambiaste,de que cambiaron las cosas y mucho pero hoy por hoy no tienes motivos para estar triste asique ya sabes lo que tienes que hacer si no quieres llevar palos yo solo aviso...

Te quiero